El director comercial de WhatsApp, Neeraj Arora, ha anunciado que dejará la compañía.
La razón exacta de su partida no se ha confirmado, pero muchos fanáticos de WhatsApp están preocupados por la introducción de anuncios al sistema, lo que, según los informes, ha causado fricción dentro de las filas de la aplicación. WhatsApp originalmente cobró una pequeña tarifa anual para usar, que compró a los usuarios conversaciones cifradas sin anuncios, sin embargo, en 2016, la compañía propiedad de Facebook retiró estos cargos. Esto llevó a muchos a preguntarse cómo la compañía continuaría generando ingresos.
Consulte cómo cifrar chats privados relacionados en WhatsApp y Gmail y enviar mensajes secretos de Facebook Mensajes de seguridad de WhatsApp habilitó a los piratas informáticos que tomaron los teléfonos con videollamadas millones de llamadas para la aplicación falsa de WhatsApp en Play Store: ¿fue uno de ellos uno de ellos??El uso de la publicidad para financiarse es una opción particularmente preocupante para WhatsApp, dada la infame falta de respeto de Facebook por los datos del usuario: la introducción de la publicidad dirigida reduce la seguridad y la privacidad de la aplicación de comunicaciones una vez segura
Arora, que fue uno de los primeros empleados de WhatsApp, se fue para "recargar y pasar tiempo con la familia", sin embargo, es solo el último de una larga línea de renuncias de WhatsApp. En noviembre de 2017, Brain Acton, cofundador de la compañía, renunció, que fue seguido en mayo de 2018 por el otro cofundador Jam Koum. Desde entonces, ambos han hablado contra el control autoritario de Facebook de la aplicación. Después de que los dos cofundadores dejaron a Arora se convirtieron en CEO, por lo que su renuncia deja esa posición abierta.
Del mismo modo, Instagram, otra plataforma de redes sociales propiedad de Facebook, ha visto recientemente a sus cofundadores saltar un barco después de informar tensiones con Mark Zuckerberg sobre la dirección de la plataforma. En ambos casos, el presidente de Facebook está acusado de tratar de monetizar las aplicaciones en detrimento de los usuarios.
Si bien las estrategias comerciales de Zuckerberg pueden estar alienando a las personas que hicieron que Instagram y WhatsApp sean populares en primer lugar, los fanáticos de estas aplicaciones pueden descansar tranquilos sabiendo que los días de Zuckerberg como presidente de Facebook también podrían estar numerados.